Resulta muy cierto el refrán en el sentido de que “Dios aprieta, pero no ahorca”, situación comprobada en Veracruz luego de que el Banco de Alimentos de Veracruz padeció crisis durante los meses de abril y mayo por contracción de los apoyos provenientes de aliados que obligaron a reducir el volumen de entregas a sólo el 40 % de las despensas del promedio anual. Esa etapa quedó supera de 8 días a la fecha.
Prácticamente se recuperó la normalidad de los inventarios, sobre todo con el arribo de tráiler enviado de oficinas centrales de la Red Nacional de Bancos de Alimentos con 15 toneladas de arroz y frijol, productos básicos en la mesa popular, además de la reactivación del fluyo de frutas, verduras y otra variedad amplia de artículos proporcionados de manera gratuita por personal de grandes tiendas y productores del área de influencia de Veracruz, informó el contador Darío Jiménez Romero, director general de la institución porteña.
Aunque las necesidades siempre existen, en el caso del programa de alimento apto para el consumo humano donado a familias registradas en el padrón actualizado, de probada justificación social; el funcionario estima que reúnen capacidad de atención continua por los siguientes 45 días. Dinámica que se prolongaría por el resto del año mediante la reposición de inventarios.
La iniciativa privada veracruzana sostiene el espíritu altruista, efectiva coadyuvancia con autoridades de los 3 órdenes de gobierno.
Donación de 15 toneladas de arroz y frijol a veracruzanos
Veracruz tiene reconocimiento nacional por el trabajo desplegado en el curso de casi 20 años. Con el ejemplo se mueven conciencia y acreditan honestidad, factor que permite la conservación de la confianza de los aliados.
En este momento atienden a 27 000 familias principalmente de la conurbación Veracruz-Boca del Río, mismas que cada 15 días reciben despensas grandes cuyo contenido también incluye leche, todo a cambio de cuota simbólica que representa el 10 % del valor comercial de las mismas, dinero ocupado en pago de salarios y gastos de transportación hasta los asentamientos de beneficiarios.
Por último, Jiménez Romero hizo referencia a la exitosa campaña promovida por el Club Rotario sobre cirugías de labio y paladar hendido, en cuyo grupo interdisciplinario participante estuvo presente el equipo del Banco de Alimentos de Veracruz atendiendo a los 51 niños y algunos jóvenes operados y familiares que los acompañaron.
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