Luego del asalto violento que sufrió el Monseñor Eduardo Cervantes Merino, Obispo de la Diócesis de Orizaba y dos sacerdotes, en el tramo carretero de la Esperanza-Puebla, a tres kilómetros antes de iniciar a descender las Cumbres de Maltrata, donde le fue arrebatada su insignia episcopal, el vocero de la Diócesis de Veracruz, Aurelio Mojica Limón, lamentó este hecho y pidió a las autoridades frenar la inseguridad, sobre todo en las carreteras del país, que son muy inseguras.

“Es pedir a las autoridades para que pongan atención en toda esta situación que se está presentando en esa zona desde ya un buen tiempo, que los transportistas han tenido ya su comunicación, por lo que están sufriendo y pues el obispo lo que ha hecho por parte de él, es tratar de invitar a que el tejido social que se ha roto, se trate de ir reconstruyendo, porque ya es lamentable no porque le pasó a él, sino porque muchas personas han sufrido esta situaciones y algunas han perdido la vida”, comentó.

El entrevistado aseguró que los hechos ya fueron denunciados ante las autoridades correspondientes, con la finalidad de dar con los delincuentes y quizás poder recuperar el objeto que le da identidad al Monseñor Eduardo Cervantes Merino, como obispo de la Diócesis de Orizaba.

Destacó que se trata de un objeto que no tiene mucho valor comercial, pero sí un valor personal, porque fue otorgado por el Vaticano.

“El obispo ya avisó por los medios de comunicación, denunciaron ya también y el valor que puede tener este objeto realmente es más religioso, es más de identidad, más personal para él, por lo que significa el haber sido nombrado obispo y de haberle dado el mismo papa este signo que le identifica y le reconoce pues delante del Vaticano, por parte de lo que es representante de la iglesia, pues habrá un lugar donde lo puedan comercializar, pues es posible que si lo haya y por eso hacen estas cosas”, comentó.

Lamentan asalto a Obispo Diócesis de Orizaba

Agregó que “hasta donde sé, sí es algo de oro y de plata, pero regularmente es de oro, lo que portan, no los pectorales, no todos son de oro, pueden ser de plata o un material más sencillo, pero depende y coincidió que él traía esta insignia que lo identifica como obispo”.

Explicó que al momento se desconoce a detalle si se robaron el anillo episcopal o el pectoral del obispo.

“En esta ocasión es lo que más siente el señor obispo”, comentó.

El entrevistado aseguró que se trata de la primera vez que se roban objetos de este tipo, sin embargo, otros representantes de la iglesia, también han sido víctimas de asaltos por la zona de Orizaba-Puebla.

Citó el caso de un sacerdote que tenía como dos años de haber sido ordenado y también fue víctima de un asalto masivo similar, donde fueron atracados varios vehículos en carretera, por la zona de Maltrata y las carreteras de Puebla.

Lo que procede es que el obispo debe de reportar el hecho al Vaticano y posteriormente habrá un medio, para poder adquirir nuevamente su anillo o el pectoral, con la autorización del papa.

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